Amar no es de prudentes

Se debate el amar, entre la locura y la prudencia
dicen que es indecencia, el amar con pasión,
pues yo no tengo razón, cuando mi amar entra en delirios.

Amar es un fastidio, en donde se pelean Cordura y Pasión.

Amar no es amiga de la razón, es cómplice de la locura.

Bien decía Rocinante: amar no es de prudentes
amar es de indecentes que cuelgan en su mente
toda sintaxis de razón.

Literari@

¿Existe alguna obra literaria, lo suficientemente buena como para ser leída?

Creo que cada quien tiene la necesidad de expresar(se).

Cada autor saca de su fuente interior, aquello que le fluye, que le brota genuinamente, creativamente, con los colores y el arte que cada quien le quiera aplicar, porque en ese instante le tiene un sentido, un propósito o un destino.

Cuando Cervantes escribió El Quijote, solo el sabia lo que quería expresar, y sacarse del pecho. Así muchísimos otros autores.

¿Qué obra literaria es digna de ser leída?

Cada quien conoce su necesidad, intuye lo que busca.

Para un autor, sus letras podrían perder sentido; pero para un sediento o un hambriento, podría ser pan recién horneado.

Pregunta: ¿Que autor literario, o que obra literaria consideras dignas de ser leída y por qué?

Tesoro

De pequeña, le llamaban la genio, la chica intelectual, la 10.

Esencialmente es una mujer con mucho talento, pero las altas espectativas la hicieron tropezar, calló y casi murió. El ego creado como monstruo, la destruyó.

Al despertar se encontró rezagada, casi en la cola, trató de volver y no pudo, se sentía desventajada, asi las cosas, guardó su sueño, en lo mas profundo de su corazón, tan bien guardado que a veces ni lo encuentra, un sueño humilde, sencillo, su futuro, su presente, su sentido y propósito de ser.

Guarda humildemente su esperanza, la ilusión de algún día llegar a ser, y levantar como trofeo, su tesoro.

En un beso

Se unen nuestras almas en un beso para encontrarse, para entregarse el espíritu y en el abrazo expirar, para llegar a lo sublime tocando el cielo del paladar, saboreando el perfume de las gargantas en flor, amigdalas de pétalos abiertas para cantarnos una canción de aguas y espumas en mares irradiados y enfurecidos, para entregarse, desbordarse y calmarse en un beso.